lunes, 4 de agosto de 2014

4-8-2014 Kuala Lumpur. Ciudad sin pasado pero con mucho futuro

Kuala Lumpur es una ciudad moderna, tanto que apenas tiene edificios que cuenten con más de 100 años de antiguedad. Hoy he estado en el Museo Nacional y me he documentado un poco sobre la historia del país. 

Entrada al Museo Nacional

Gatos malayos en la cafetería del Museo

Llama la atención que desde la era prehistórica de la cual han conseguido recuperar algunos huesos, tumbas y alguna que otra herramienta rudimentaria, la historia del país pasa directamente a unos 200 años antes de la colonización portuguesa allá por el año 1500, a la que luego le siguieron los holandeses y los británicos, éstos ya antes de su independencia en 1956. Todo ello ocurrió además en Malaca, una ciudad portuaria con la que controlaban el estrecho del mismo nombre y que visitaré los días antes de volver a España, porque entonces Kuala Lumpur  no existía como tal. 

Por ejemplo, éste es uno de los edificios más conocidos y es de reciente edificación.

Por ello la ciudad carece de edificios o templos históricos y prácticamente todo lo que hay que ver, en lo que a edificaciones se refiere, son de este siglo o el pasado. Es quizás la mayor diferencia que he encontrado con el resto de las capitales del Sureste Asiático. Llama la atención la escasa existencia de templos pese a la cantidad de religiones que se profesan aquí. De ahí, de la falta de visitas más interesantes es por lo que hoy he vuelto a las Torres Petronas y haya paseado por su extraordinario centro comercial donde recalan las más lujosas marcas del mundo sin excepción. Obviamente he aprovechado para hacerme un nuevo selfie con las Torres de fondo y es que hay que reconocer que no te cansas de mirarlas, son absolutamente impresionantes y únicas. Me pasa pocas veces algo así.

Pincelada del colosal Centro Comercial situado bajo las Torres. El mayor del país.

Tenía que dejar constancia de que aquí había estado yo.

Así por ejemplo, tras la visita al Museo he ido hasta la gran mezquita, grande, muy grande, porque el país es de mayoría musulmana aunque hay que decir que prácticamente no se nota cuando andas por sus calles, donde hay una mezcla de culturas importante, sobre todo India y China. Sólo los uniformes escolares y alguna que otra mujer con ropas tradicionales parecen indicar que se trata de un país islámico,


La Gran Mezquita. Edificio moderno, enorme y con poca vida.

No había pensado, como la mayoría de los visitantes, que no se puede entrar en una mezquita con pantalones cortos o falda, así que todo el mundo ha tenido que vestir el "uniforme" que nos han facilitado. 

Aquí es donde vestían a todo el mundo con "ropa apropiada".

Y éste es el resultado definitivo de mi "transformación"

En la sala de oraciones no estaba permitido el paso a los turistas aunque tampoco había nadie rezando por allí, de hecho recuerdo haber oído esta mañana lo que parecía una lejana llamada a la oración, pero nada que ver con un país musulmán, más bien todo lo contrario.

Enorme pero vacía, nunca había visto una mezquita sin gente

Ya he comentado que la ciudad no tiene pasado pero si mucho futuro, no hay más que ver la gran cantidad de nuevas infraestructuras que se están construyendo, y no sólo el metro de la ciudad, también nuevos rascacielos e imponentes hoteles que irán configurando el ya espectacular skyline de la ciudad.

Supongo que aquí no debe haber mucho paro, de hecho, hasta ahora no he visto un sólo mendigo ni gente tirada en la calle y además, como se puede ver en esta fotografía hay suficiente gente en las obras.

 Como en casi todos los sitios, uno trabaja y el resto mira... no son muy diferentes..

Algunas fotos que he ido tomando hoy de la ciudad, realmente no se observan calles que pudieran recordar a Indochina, si exceptuamos la calle de mi hotel que bien podrían mimetizarse perfectamente en Laos, Camboya o Vietnam. Esoo si, mi hotel  está en la mejor área de la ciudad para hospedarse.

Vista desde la parte posterior de las Torres Petronas

Esta vista desde un lateral y es que la zona es toda reciente y donde se ejecutan un montón de nuevas construcciones

Esta zona la he pateado varias veces y la tengo totalmente dominada

Zona posterior de la Gran Mezquita

Calle de mi hotel

Afortunadamente no me pongo las gafas de leer para la cena y lo cierto que es que cada vez me veo menos de cerca, lo que en este caso me va bien para no saber que estoy cenando exactamente. Algunas cosas tenían un sabor extraño pero estaban bastante buenas y otras tenían una textura un tanto curiosa cuanto menos. Esta vez lo he acompañado con agua.

Cena de hoy. No sé que es porque lo he pedido por la foto y el nombre no me sonaba.

Finalmente he ido a darme un masaje de una hora, o eso creía, puesto que en cuanto ha empezado a apalearme y ponerse de pie sobre mi espalda, aunque era pequeñita, he dicho que con media hora bastaba, por no irme antes. Así que me he ido a tomar un par de mojitos aprovechando que hay happy hour y te dan dos por el precio de uno y así aprovecho y  voy escribiendo este blog,

El mojito no está mal para estas latitudes.


NOTAS DE INTERES

La opción del Autobus Hop On Hop Off, es buena para no tener que coger taxis y tener una idea de lo que ofrece la ciudad fuera del centro. Util para ir a ver la Gran Mezquita que está un poco lejos, pero no esperes bajar en más de dos o tres sitios porque no vale la pena. Lo recomiendo sólo como medio de transporte.

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